Blog
Cómo decir no con elegancia a un cliente
Arranca la convocatoria del Kit Digital para pymesPerfil actual del autónomo en España (incluye infografía)Las pymes y la nube: 8 datos a tener en cuenta antes de lanzarse al cloud computing10 consejos de ciberseguridad para proteger tu negocioMujer Autónoma – #SoyAutonomaCierre anual del autónomo con sabor agridulceHacienda lo tiene claro: Si alquilas tu vivienda habitual, no podrás deducírtela en el IRPFRomance o aventura de una noche ¿qué relación quieres con tus clientes?Los tres grandes retos para el futuro de las empresas: Cloud, Data y SeguridadGranada acoge el primer gran encuentro de jóvenes empresarios de Andalucía OrientalCómo los informes de personas ayudan a asegurar beneficios5 apps para aumentar la productividad en el trabajoEmpresas con deudas: aún queda esperanza con las nuevas medidas de refinanciaciónCómo conseguir una gestión financiera exitosaSegunda parte de la ampliación de la tarifa plana: edición limitadaReflexiones antes de la Ley de EmprendedoresLa carga tributaria de las empresas españolas alcanza el 49%Renting o leasing para autónomos, ¿cuál es el más interesante?¿Y si no has recibido la autorización del ERTE en cinco días?Los 5 beneficios de la centralita virtual para tu negocioEl Pago único o la Capitalización del DesempleoLLamadas en frío: ¿Me envías la información por email?8 consejos para ahorrar en la factura de la luzLa morosidad en España: infografía y prevenciónLas mejores herramientas de inteligencia artificial para autónomos y pymesCondiciones para el aplazamiento del IVA de los autónomos

TE LLAMAMOS GRATIS

Nombre(Obligatorio)
Este campo es un campo de validación y debe quedar sin cambios.

Cómo decir no con elegancia a un cliente

Resumen > En ocasiones tienes que pasar por el duro trago de declinar a a un cliente o un proyecto. Para justificarlo, quedar elegantemente y que no afecte a tu reputación corporativa hay que seguir una serie de pautas.

Actualizado el 19 de enero de 2016

2 minutos de lectura

Por Ru

Hay muchas maneras  de decir no. Ante todo, hay que tener en cuenta el saber estar y la educación de uno mismo a la hora de declinar un proyecto o trabajo o un cliente por las razones que sea. Existen formas de decir no de manera elegante sin que el cliente se moleste. Veamos una serie de pautas:

1. Estoy muy ocupado. Aunque la verdad sea bien distinta y estemos esperando a recibir llamadas de tus clientes, sino te interesa un cliente, puedes siempre decir que estás muy ocupado. Además, da buena imagen y siempre es una razón válida para rechazar un trabajo.

2.Evitar a un cliente. Hay veces en las que ya estamos trabajando de lleno con un cliente, pero la situación y la relación empeoran. Lo ideal es hablar con calma, ser diplomático con este cliente para transmitirle que tu estilo de trabajo y el suyo no casan y que lo mejor será que busque otro proveedor antes de que afecte a la empresa. En este aspecto, intenta quedar bien si el que “rompe” la relación laboral eres tú, ofrécele datos de contacto de algún perfil similar al tuyo, de algún colega con más paciencia o que pueda irle bien con este cliente por su forma de ser. En muchos casos, depende de la relación que tengas con el cliente pero quedarás bien si te ofreces a ayudarle a buscar otra opción, aunque no la tengas.

3.La honestidad. Sé honesto y úsala cuando veas que tu cliente pide cuestiones imposibles. Cuando te llama un viernes a las 15 horas para un tema importante y que te podría haber pedido a las 10 horas, o bien cuando te encarga mil cosas que no podrás afrontar en tan breve plazo de tiempo. En estos casos, debes conocerte y saber cuánto puedes asumir y qué no. Dale a conocer tus plazos y lo que podrás conseguir. También pídele que cuanto antes te pida ciertas cuestiones, será mejor para todos.

4.No cubro mis gastos. Hay veces que el cliente exige ciertos trabajos por los que cuales facturaríamos de manera adicional. Diferente es que sea algo puntual. En este aspecto, intenta “aguantar el tirón”; pero si se trata de un servicio ya habitual, trasládale que por ese coste el volumen de trabajo crece y por tanto debes facturarlo aparte. Trasládale la visión de que “a más trabajo, más facturación” ya que tu tiempo es tu vida y es lo que te da de comer. Quedarás como alguien que sabe perfectamente lo que quiere, lo que vale y lo que no está dispuesto a poner en riesgo. Simplemente, comunícalo con estilo, de manera educada y sincera.

5.Sube el precio.Esta estrategia es solo para casos muy especiales. Imagina un cliente que ya conoces, o el amigo, o alguien con quien no quieres trabajar por la razón que sea y te piden algo. En estos casos puedes subir el precio a este posible cliente por el tiempo, esfuerzo del proyecto por ejemplo. Si acepta el precio, por lo menos trabajarás de manera más positiva…

6.Trabajar gratis. Esto es un aspecto al que se debería responder de manera tajante ya que si un cliente tiene la “valentía” de pedirlo, deberíamos responderle de igual manera, aunque, siempre, cortésmente. Una forma educada de decirle que no a un cliente que te pide le trabajes gratis (o casi) es explicar lo terriblemente comprometido que estás con otros proyectos, que estás hasta arriba y tienes que priorizar entre una persona que te paga y otra que no. Sé que a todos nos gusta mucho trabajar gratis (modo irónico on); pero debido a otros compromisos adquiridos con anterioridad, te será imposible asumirlo.

Es normal que uno sienta miedo después de haber rechazado a un cliente.  Nos asusta quedarnos sin clientes, sin dinero y que nuestra vida entre en un pozo sin fondo. Hay que tener en cuenta que como autónomos asumimos ese riesgo, pero recuerda que, ante un cliente perdido que no te convencía no hay lugar para el arrepentimiento.

Ru

Web de referencia en información y servicios para autónomos emprendedores y pymes

La ventana a la actualidad
para emprendedores, autónomos y pymes

Únete a nuestros más de 300.000 suscriptores que ya están al día de todas las novedades y ofertas gracias a nuestra Newsletter